Los basiliscos son animales insectívoros. Su dieta se compone básicamente de invertebrados y pequeños vertebrados como son los grillos, cucarachas, larvas de polilla, saltamontes, langostas o lombrices de tierra. Como siempre decimos, no se debe basar la dieta de los animales en uno o dos ‘platos’, y de vez en cuando podremos darles flores, frutas y vegetales frescos. Todos los insectos deben ser de criadero. Es indispensable espolvorear los insectos antes de ofrecerlos con suplemento de calcio y vitaminas para reptiles.
Se pueden incluir en la dieta crías de ratón, ya que son muy ricos en calcio, pero de forma ocasional, por ejemplo dos veces al mes. Los basiliscos que aún no son adultos ingerirán insectos de menor tamaño como moscas de la fruta.