El pez Tetra Ciego

Se supone que este pez ciego es una mutación natural del Astyanax fasciatus. Parece ser que algunos carácidos fueron arrastrados por una crecida de agua, la cual los llevó hasta los mantos acuíferos subterráneos (en su hábitat natural habita en cavernas) y, debido a que no llegaba la luz directa del sol a esos lugares, estos peces comenzaron a evolucionar y desarrollaron mejor el sentido del olfato, por lo que la vista se hizo innecesaria. Es por lo que estos peces son ciegos, sus ojos están pegados y cubiertos por una membrana. Los ejemplares jóvenes sí poseen ojos, pero desaparecen a medida que envejecen; éstos, al pasar el tiempo, son cubiertos por tejido conjuntivo.Olfato y tacto están muy desarrollados en esta especie, al igual que los canales sensoriales de la línea lateral, que le sirve para orientarse. Este pez carece de pigmentación, hecho que hace que se muestre el color de su carne que le da un aspecto rosáceo. Crece 9 cm el macho y unos 12 cm la hembra. En acuario suelen permanecer más pequeños. El macho suele ser más alargado y pequeño que la hembra, que tiene un estómago de contornos más redondeados y de tonalidades más tenues. La aleta dorsal en el macho es en punta y en la hembra es redondeada.
En cuanto a la temperatura, debe estar entre 17 y 25ºC. Agua: pH 7. Exige aguas medianamente duras, aunque en cautividad podrá ser algo menor (puede convivir con vivíparos que comparten dichas exigencias de agua).
Se integra perfectamente en un acuario comunitario, que ha de ser como mínimo de 60 litros, bien filtrado y con poco movimiento. Le gusta nadar y necesita mucho espacio. Es aconsejable poner plantas flotantes que les proporcionen sombra. Lucen mejor en un acuario con un fondo oscuro (negro mate) e incluso sustrato negro.
Es omnívoro, se alimenta de organismos vivos y alimentos secos. Su ceguera no le impide encontrar e ingerir comida.
Es un pez de desplazamiento en grupo, deberá reunir a cinco peces como mínimo, y más a ser posible. Son nadadores veloces y de carácter sociable, y se llevan bien con otros peces, incluso con los más pequeños.  Es una especie fácil de reproducir.

¿Es recomendable ponerle un calentador de agua a las tortugas acuáticas?

Las tortugas acuáticas necesitan el agua caliente, son tortugas tropicales, así que hay que poner un calentador y tenerlas como mínimo a 26ºC. Un calentador en el tanque de las tortugas les asegura una temperatura estable de aguas tropicales durante todo el año. El problema es que las tortugas en libertad hibernan tras haberse preparado para ello, pero en nuestros hogares muchas no han tenido la opción de alimentarse todo lo necesario para acumular reservas durante el verano y llegan a la hibernación en malas condiciones. De esta manera, si conseguimos una temperatura ambiente agradable y que las tortugas sigan activas comiendo durante los meses más fríos, evitaremos el riesgo de que lleguen a la primavera demasiado faltas de reservas y mueran. Esto es especialmente importante en las más jóvenes.

¿Para qué sirve el espumador de proteinas del acuario marino?


El objetivo del espumador es el de retirar la mayoría de desechos orgánicos no deseados de nuestro acuario marino.
Para retirar la materia orgánica el espumador se basa en la formación de diminutas burbujas en su interior creando una interfase agua-aire provocando que las partículas orgánicas se adhieran a las burbujas. Posteriormente se forma una espuma densa que se acumulada en la copa del espumador.
Existen varios tipos de espumadores, desde los más sencillos accionados por un compresor hasta los más complejos de tamaño considerable.
El espumador es uno de los elementos más importantes en la filtración. Como todo tiene sus pros y sus contras. Su principal problema es que no discrimina las substancias que elimina extrayendo tanto los elementos nocivos como deseables (trazas, yodo…). Podemos añadir aditivos o realizar cambios de agua con una buena sal para reponer estos elementos.

¿Dónde es más aconsejable comprar un camaleón?

Si compramos un camaleón criado en cautividad tendremos más garantías que si lo adquirimos en tiendas que ofrecen camaleones cogidos de la naturaleza o criados en 'granjas' en semilibertad, pues, en estas instalaciones los animales suelen portar parásitos internos, además de llegar muy estresados a las tiendas.
Los camaleones criados en cautividad han nacido con supervisión y generalmente llevan varias generaciones gestándose de forma controlada. Están acostumbrados a la presencia humana y no añoran los espacios abiertos. No suelen tener parásitos y no padecen largos días de transporte y almacenaje.

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